Jesús G. López-Gómez, Centro de Enfermedad Inflamatoria Intestinal, Centro Médico Nacional 20 de Noviembre, Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado, Ciudad de México, México
Sofía M. Narváez-Chávez, Centro de Enfermedad Inflamatoria Intestinal, Centro Médico Nacional 20 de Noviembre, Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado, Ciudad de México, México


En las últimas dos décadas, la terapia biológica se ha convertido en la piedra angular del tratamiento de los pacientes con enfermedad inflamatoria intestinal, que comprende la colitis ulcerosa y la enfermedad de Crohn. El desarrollo del tofacitinib, un inhibidor potente de la familia de las JAK (Janus kinase), fue el punto de partida de la era de las moléculas pequeñas después de la era de los productos biológicos. Estas moléculas pequeñas podrían desafiar el uso de agentes biológicos en el futuro, con los que comparten unos bajos costos de producción, la falta de inmunogenicidad y la facilidad de uso como algunos de sus beneficios, y además tienen tributos adicionales, como un rápido inicio de acción y eficacia en pacientes pretratados con terapia biológica. Por otro lado, debemos estar atentos a los posibles efectos secundarios de estas moléculas pequeñas, entre las que se encuentran los inhibidores de JAK y los moduladores de S1PR (Sphingosine-1-phosphate receptor).



Keywords: Moléculas pequeñas. Colitis ulcerosa. Tofacitinib. Etrasimod. Upadacitinib.